La historia de la congregación de Cereté es un testimonio conmovedor de fe y perseverancia. Su origen se remonta a la oración respondida de una mujer, Eloína Batista (q.e.p.d.), quien con profunda convicción clamó a Dios por la sanidad de su sobrino.

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Animada por esta experiencia, Eloina inició un grupo de oración en el patio de un taller de su propiedad, ubicado en la Avenida Santander. Con el tiempo, este grupo creció y se trasladó a otro de sus terrenos en el Barrio Santa Teresa. Reconociendo la necesidad de una guía espiritual, Eloina, buscó el respaldo de la Iglesia Centro Familiar Cristiano Internacional entonces liderada por el Pastor Carlos Alberto Da Silva.

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Atendiendo a su petición y visionando la expansión del Evangelio, el Pastor Carlos Alberto envió al obrero Henry Lozano a Cereté. Su misión era acompañar al creciente grupo de fieles y encontrar un lugar adecuado para establecer una nueva congregación. Así fue como el 30 de diciembre de 1995, el obrero Henry Lozano llegó a Cereté. Tras evaluar diversas opciones, alquiló un local conocido como "la Corocera" en el barrio Santa Teresa. Este espacio fue rápidamente adecuado y habilitado, y el 19 de enero de 1996 marcó la apertura oficial de la congregación, a la que se unieron los asistentes del grupo de oración original.

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Años más tarde, en un acto de generosidad y fe, Eloina Batista (q.e.p.d.) donó un terreno a la obra de Dios. Este lote, sumado a otro adquirido por la Iglesia Central, se convirtió en la sede principal de la congregación de Cereté, donde funciona hasta el día de hoy. Es fundamental destacar el invaluable apoyo de esta mujer de Dios, quien no solo aportó el terreno, sino también materiales cruciales para la construcción del templo.

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Después de casi tres décadas, la congregación de Cereté ha fructificado de manera notable, dando origen a nuevas "hijas" en otros municipios y contribuyendo significativamente a la consolidación del Reino de Dios en la tierra.

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Cereté es un municipio del departamento de Córdoba, Colombia, conocida como “La capital del Oro Blanco” debido a su alta productividad de algodón en el pasado reciente. Es un centro de desarrollo agroindustrial del medio Sinú hace parte del área metropolitana de Montería, siendo el segundo municipio más poblado después de la capital Montería, este municipio también es conocido por su tradicional gastronomía, famosa por sus deliciosos quibbes dada la influencia de la cultura sirio-libanesa.